Me dicen algunos buenos amigos, que tengo una forma de ser, hacer y pensar las cosas que les agrada, que no soy como el común de las mujeres, no soy sumisa, soy rápida para pensar, ágil, digo lo que pienso y siento sin importarme el que dirán, claro que eso no es fácil en más de alguna oportunidad me ha costado caro, pero siento y en esto creo estarán de acuerdo algunas féminas, que si no digo lo que pienso, o no actúo como pienso si no soy consecuente conmigo misma, es como si poco a poco me estuviese poniendo un yugo sobre mis hombros que a medida que el tiempo pase me irá mermando y subyugando como mujer y persona.
Lamentablemente nosotras tenemos un yugo natural que es cuando nos enamoramos, hacemos y decimos y actuamos todo por esa persona que nos llena el alma y nos conquistó el corazón, pero no vemos que debemos hacerlo por nosotras y no por ellos...no vemos que con el pasar del tiempo nos trasformamos en esclavas de un amor que muchas veces nos daña y nos somete aunque no queramos y nos convierte en prisioneras dentro de una hermosa jaula de oro.
Martín, él hombre al cual amo me dijo una vez que el amar es ser libre y sentirse feliz por el otro, entiendo la segunda parte, pero no entiendo la libertad de la cual habla, si todo lo que una hace lo hace por ellos, se preocupa por ellos, anda al pendiente y muchas veces no es recíproco ¿Quid Pro Quo?, en Latín significa Algo por Algo, aunque en la jerga normal es Reciprocidad...
Me encantaría pensar que así es, pero la realidad es otra, ningún hombre nos ama y deja de pensar en ellos mismos como nosotras las mujeres, ningún hombre es capaz de decir mi mujer es lo primero para mi, ningún hombre es capaz de ver que con una omisión o falta nos lastima, ninguno es capaz de ver que con una palabra nos hiere o si nos levanta la mano nos destruye, entonces ¿de qué reciprocidad hablamos?...me gustaría pensar que el amor entre un hombre y una mujer es recíproco pero no es así, siempre damos más nosotras que ellos y ellos creen que por darnos algo material eso es amor, cuando el amor es verse en los ojos del otro, poder decir caminemos juntos, es poder darnos amor a la par y con la misma vocación e intensidad... yo amo a mi pareja, y aún espero su QUID PRO QUO...
Suerte a todos...hasta la próxima...
Idril Elanessë