Se han dado cuenta que nosotras las mujeres durante el 100% de nuestra vida el 75% de ella usamos “PAÑALES”, eso quiere decir que las 3/4 partes de nuestra existencia como mujeres estamos condicionadas a usar esta prenda, ahora les explico, ¿por qué?
Primero cuando nacemos nos ponen pañales, durante casi 2 años, hasta que aprendemos a decir que necesitamos ir al baño.
Segundo, descansamos durante un tiempo hasta aproximadamente los 9 a 12 años, hasta cuando entramos en el ciclo menstrual y con ello volvemos a usar esta prenda, ya sea con aromas o sin ellos, toallas con alas o sin como si las necesitáramos para volar, o en su defecto los tampones, que tampoco es muy cómodo andar todo el día con un tampón de algodón simulando ser un pene pequeño metido dentro de nuestra vagina.
Tercero, este periodo nos dura hasta casi cerca de los 50 a 55 años, usando pañales, si hasta aquí van sacando la cuenta verán que ya es bastante tiempo el uso, y el gasto económico.
Cuarto, terminado el periodo de ciclo menstrual entramos al de menopausia, otra vez en más de alguna ocasión nos veremos obligadas al uso de esta prenda, por la famosa incontinencia urinaria.
Y en quinto y último lugar cuando ya nos dejen en algún hogar de ancianos, en su mayoría muchos volveremos hacer niños desvalidos y tendremos por obligación que volver a usar esta prenda por que ya no controlamos esfínteres.
Si sacan cuentas mis amigas queridas aparte de dejar pagado nuestro velorio y funeral para no hacer gastar a nuestros parientes, deberemos dejar una enorme parte de nuestro dinero en pos del “PAÑAL” y así abaratar costos excesivos, porque como vamos en este mundo, el tener a nuestros ovarios cómodos nos cuesta una fortuna buscando que tipo de prenda nos acomoda más, si el protector de uso diario, la toalla higiénica o sanitaria, o el infaltable tampón vaginal.
Y sin contar lo que significa cada fecha de ciclo menstrual con su llegada, un estrés horrible, dolores en los pechos por su inflamación, extremadamente sensibles, dolor en el bajo vientre, dolor en la cintura y espalda, y un humor de mil diablos, porque debemos andar preocupadas de no mancharnos y contabilizando el cambio por hora y a diario.
Además de seguir siendo mujeres, como si nada pasara.
Bueno espero que este pequeño recuento de gastos a nuestro haber como mujeres nos sirva, porque déjenme explicarles esto el ser mujer es maravilloso, somos geniales pero el uso de “PAÑALES” es un verdadero fastidio y exagerado gasto económico.
Hasta pronto… see you…
Idril Elanessë